Cruyff: la jugada maestra que convirtió al Barcelona en leyenda y dejó al Real Madrid sin su icono
19 octubre 2025

La historia detrás del fichaje de Cruyff
Con frecuencia, Real Madrid y Barcelona han luchado por fichar a las mejores estrellas del mundo, tanto en el pasado como en la era moderna, entre ellas Alfredo Di Stéfano, Neymar y David Beckham, una de las rivalidades más célebres del fútbol.
Pero entre esas historias destaca la de Johan Cruyff, la leyenda de Ajax que estuvo a punto de vestir de blanco, antes de decidirse por el Barça y escribir una parte central de la historia del club.
Las versiones son variadas: algunos aseguran que fue el propio jugador quien rechazó al Real Madrid, insistiendo en lucir el azulgrana, mientras otros apuntan a factores puramente económicos.
El relato arranca en una década de cambios: la Liga española había restringido fichajes extranjeros y la guerra de papeles y nacionalizaciones sembró la confusión a comienzos de los 70.
En 1973, la Federación decidió volver a abrir las puertas a jugadores extranjeros, y Barcelona recibió un mensaje claro de que había que moverse.
En ese momento, Vic Buckingham, entrenador del Barça, instó a la directiva a fichar al joven Cruyff de 23 años del Ajax.
Pero la directiva no aceptó, y Cruyff siguió en Ajax, ganando la Liga de Campeones de 1971, 1972 y 1973, y convirtiéndose en la joya europea.
Entonces, la historia dio un giro: Real Madrid ofreció 30 millones de pesetas; Barcelona respondió con 50 millones y un salario de 5 millones por temporada.
El fichaje costó a Barça cerca de 90 millones de pesetas, y Cruyff pasó a ser el jugador más caro del mundo.
Las críticas se centraron en si el dinero fue el motor de la operación o si Barcelona estaba dispuesta a apostar por una idea.
Entre rumores, hay quien afirma que la cláusula de un estadio en construcción, y otros que creen que todo respondía a la voluntad de Cruyff.
En febrero de 1974, Cruyff apareció con la camiseta del Barça en un Clásico decisivo, y el club catalán venció 5-0 al Madrid, en la vuelta al Camp Nou tras 14 años.
Ese partido dejó claro que la inversión en Cruyff había sido un hito para el orgullo del Barça y para el propio fútbol europeo.
Cruyff, ya entrenador, volvió a Barcelona en 1988 para iniciar una revolución táctica que cambiaría la identidad del club para siempre.
Bajo su mando, el Barça ganó cuatro ligas consecutivas (1991-1994) y la primera Copa de Europa en 1992, cimentando la era dorada del club.
En la historia del Clásico, su estilo dejó una marca de juego de posesión y ataque que otros como Guardiola, Xavi e Iniesta simplemente continuaron.
Fue más que un jugador o entrenador: un símbolo de transformación, que convirtió al Barça de un club en busca de identidad en una escuela de fútbol, y llevó al Clásico a ser una batalla entre creatividad y rigor, entre arte y victoria.
Y tal vez la brisa no haya convertido ese gol perdido en leyenda, pero su espíritu sopla con cada pase y cada tiro de Barcelona hasta hoy.
Si Cruyff existiera hoy, probablemente diría que el balón elige su camino; pero su camino ya lo trazó él: con ideas que siguen girando como maquetas de arte en el campo.
Punchline 1: Cruyff no utilizaba la puntería, usaba la filosofía: el balón está para pensar, no para ver quién llega primero.
Punchline 2: Si el viento intervino en un gol en aquel Clásico, imaginen cómo terminaría si el comediante detrás de la jugada fuera un sniper de la ironía: apuntó tan alto que hasta la portería se sonrojó.