Kane al borde de perderse el choque contra Gales: ¿qué significa para Inglaterra si no llega a Wembley?

Situación actual

El capitán Harry Kane podría perderse el encuentro de Inglaterra ante Gales, a pesar de haber sido convocado para la concentración del equipo. Todo parece derivar de una posible torpeza en el tobillo durante el triunfo del Bayern de Múnich ante Eintracht Frankfurt la pasada semana, cuando el delantero recibió atención médica en el terreno de juego y fue sustituido en los minutos finales por Nicolás Jackson, cedido del Chelsea. A sus 32 años, Kane ha mostrado una forma física y una puntería que invitan a mirar con optimismo el tramo decisivo de la temporada, pero la lesión podría obligar a la selección a contemplar un plan B para el frente de ataque.

Contexto y posibles alternativas

Aquí continúa la noticia: Kane no participó en la sesión de entrenamiento previa al encuentro contra Gales y su habitual presencia en Wembley podría verse reducida si el tobillo no responde. El equipo está sometido a un programa de recuperación en la sala de fisioterapia, y el defensa Jarrell Quansah, que también arrastra molestias, acompaña a Kane en este proceso de readaptación.

Entre tanto, el entrenador del Bayern, Thomas Tuchel, elogió públicamente su rendimiento y recordó que Kane está viviendo un nivel máximo de forma. En declaraciones a un diario germano, Tuchel afirmó que Kane es el mejor delantero de su generación y que su rendimiento actual se sitúa por encima de la media, incluso marcando a ritmo de dos goles por partido.

Kane atraviesa una temporada extraordinaria con el Bayern: 18 goles en apenas 10 encuentros oficiales, y además ha acumulado cinco tantos con la selección inglesa desde comienzos de año, un dato que resalta su impacto a nivel de clubes y de país, incluso cuando la controversia de su posible ausencia abre debates sobre la efectividad de un plan de ataque sin su referencia.

Si Kane no llega a tiempo, el Bayern podría buscar alternativas y la mirada se dirige a Ollie Watkins, como la opción más probable para reemplazarlo, mientras que Marcus Rashford también podría entrar en escena si Tuchel decide apostar por una versión más versátil del ataque, aprovechando su rendimiento durante su cesión al Barcelona.

Por su parte, el club alemán confía en que Kane se recupere con rapidez para el siguiente choque frente al eterno rival Borussia Dortmund, programado tras el parón internacional, cuando la lucha por la Liga y la clasificación continúe en serio.

No es el único quebradero de Inglaterra: la selección anunció la baja de Reece James, que fue reemplazado por Nico Oriolí en la convocatoria, lo que añade más variables a un equipo que busca cerrar la fase de grupos con la tranquilidad necesaria.

Con Inglaterra líder indiscutible de su grupo, tras cinco victorias en cinco compromisos, el calendario marca dos partitivos clave en la ventana internacional: ante Letonia y posteriores duelos frente a Serbia y Albania, que podrían definir el pase directo a la fase final.

El relato de Kane continúa: nació en Londres en 1993, dio sus primeros pasos en la cantera del Tottenham y, tras pasar por cesiones en Leicester, Norwich y Millwall, se convirtió en el delantero número uno de los Spurs, antes de dar el salto al Bayern en 2023.

Con una trayectoria internacional que lo llevó a liderar a Inglaterra en el Mundial de Rusia 2018 y a protagonizar la de la Euro 2020, Kane ha dejado huella por su capacidad de finalizar jugadas, su inteligencia en el juego sin balón y su compromiso con el equipo.

Más allá de la titularidad de Kane, la situación complica la preparación de Inglaterra para las eliminatorias mundialistas, pero la selección tiene una plantilla amplia y experiencia para cubrir la baja si fuera necesario. Gareth Southgate, con la serenidad de un capitán que ya ha visto tormentas, insiste en que el equipo puede competir al máximo sin depender de un solo goleador y que otros jugadores están listos para dar un paso adelante cuando el balón ruede.

En resumen, Kane sigue siendo el referente y el espejo donde muchos esperan los goles. Si logra recuperarse a tiempo, Inglaterra podría seguir en el camino de la clasificación con la seguridad que dan sus mejores años. Si no llega, el plan B debe brillar y la afición deberá confiar en la inteligencia colectiva de un grupo que ha sabido sobrevivir a bajas antes.

Punchline: Si Kane no llega a tiempo, Wembley podría convertirse en una masterclass de paciencia: el balón espera, y la grada aplaude a cámara lenta. Otra: si la lesión se complica, siempre podemos vender entradas para ver a la defensa convertirse en entrenadores de ataque; es la versión más barata de magia táctica.