Marruecos escribe historia: 16 victorias consecutivas y un gol que hizo cantar a África
14 octubre 2025
Contexto y resultado
La selección de Marruecos derrotó 1-0 a Congo gracias a un gol de Youssef En-Nesyri, entrando como suplente y aprovechando una oportunidad en el segundo tiempo. Este resultado mantiene a Marruecos en la senda de la victoria y consolida su paso perfecto en las eliminatorias para el Mundial.
Con este triunfo, el combinado africano acumula 16 victorias consecutivas en las clasificatorias, estableciendo un récord mundial y dejando atrás a otros grandes equipos. El gol llegó tras una acción colectiva bien ejecutada, y el delantero aprovechó una asistencia de sus compañeros para batir al portero rival.
Ambiental y cambios tácticos
El encuentro estuvo marcado por un ambiente inusual: a pesar de ser un partido en casa, hubo un boicot que se dejó sentir en la asistencia, con tribunas aún vacías al inicio. Esto sorprendió a jugadores y cuerpo técnico, que no estaban acostumbrados a una atmósfera así desde la última gran hazaña mundialista.
Cambios para insuflar vida
Walid Regragui introdujo cambios notables, enviando a la cancha a Naïf Akark en lugar de Adam Masina y dando minutos a jóvenes como Ilyas Ben-Saad y Hamza Igaman, con la idea de dinamizar un ataque que había mostrado cierta torpeza en encuentros previos.
Dominio sin premio y reacomodos
El inicio fue de dominio absoluto de Marruecos, con un Congo que se limitó a defender. La posesión superó ampliamente el 80% en la primera parte, pero las ocasiones claras brillaron por su ausencia y Mohamed Bono apenas fue exigido. Intentos lejanos desde la banda ofrecían algo de peligro, pero sin profundidad suficiente para abrir el marcador.
La oposición, sin embargo, cerró espacios y se aferró a una táctica defensiva, repetiéndose un guion similar al de la pasada amistosa ante Bahréin: llegada sin concreción y presión constante para conservar la igualada.
La apertura y el gol decisivo
En la segunda mitad, el entrenador movió fichas: En-Nesyri entró por Ben-Saad para aprovechar su juego de cabeza, mientras Hakimi generaba juego por la banda derecha. En el minuto 66, una asistencia de Hakimi dejó a En-Nesyri en posición de rematar y, con un disparo preciso, abrió el marcador.
Con la ventaja, Marruecos multiplicó el control del juego y mantuvo la presión, encontrando opciones en las desmarques de El Kaabi y la movilidad de Díaz, aunque el gol llegó a última hora para sellar el triunfo.
Un hito histórico y un cierre sobrio
Tras el tanto, el equipo siguió empujando para ampliar la ventaja, pero las oportunidades no se concretaron. El triunfo confirmó la marca histórica de 16 victorias consecutivas en las eliminatorias, consolidando a Marruecos como una de las selecciones más consistentes de los últimos tiempos.
En resumen, una noche de récord, con matices de intensidad emocional y una afición que, a pesar de todo, celebró el resultado y la claridad de un camino que parece cada vez más despejado para el equipo magrebí.
Y para cerrar con humor de sniper: si Marruecos sigue así, hasta el balón va a pedir permiso para entrar al vestuario rival. Segunda punchline: con 16 victorias, están tan enrachados que incluso el calendario se está poniendo en modo modo
