Real Madrid en Almaty: la estrategia de Xabi Alonso para tumbar al Kaïrat y apuntar a la clasificación

Contexto y estrategia

Después de la dolorosa derrota en el derbi, el Real Madrid encara un viaje largo hacia Asia Central, concretamente a Almaty, para medirse al Kaïrat en la segunda jornada de la fase de grupos de la Champions League. El objetivo es recuperar confianza y reforzar la idea de juego, sabiendo que el rival, a priori, parece asequible, pero exige un rendimiento alto a nivel técnico y físico.

El viaje de más de 6400 kilómetros no es un simple desplazamiento; es una oportunidad para "lavar las heridas" y recuperar sensaciones tras la goleada frente al Atlético de Madrid (5-2), un golpe que dejó secuelas en forma de lesiones y pérdidas de rendimiento dentro del vestuario.

Alineación y factores clave

El equipo llega con varias bajas sensibles: Eder Militao se pierde el viaje por una lesión en el tobillo izquierdo, y Antonio Rüdiger continúa fuera de la dinámica; David Alaba muestra altibajos físicos y ha disputado apenas 10 minutos oficiales en lo que va de la campaña. Ante estas ausencias, el técnico Xabi Alonso debe tomar decisiones difíciles, destacando la confianza en Raúl Asensio y la continuidad de Hussein en el eje defensivo, al tiempo que Federico Valverde ocuparía el lateral derecho, a sabiendas de que no es su posición natural, pero se convierte en la opción ante la sanción y la lesión de Dani Carvajal, además de la ausencia de Trent Alexander-Arnold.

En el arco, Thibaut Courtois sigue siendo el guardián indiscutible, clave especialmente en encuentros fuera de casa. En medio, la zona que concede a Alonso cierta flexibilidad táctica, con Aurélien Tchouaméni como eje de equilibrio entre defensa y ataque. A su lado, se espera que empiecen Eduardo Camavinga y Dani Ceballos para aportar solidez física y control del juego. Jude Bellingham mantiene su titularidad, ya consolidado como pieza central desde el inicio de la temporada.

En ataque, la situación es más difusa: se baraja descansar a Mbappé tras el esfuerzo reciente, dejando la puerta abierta para Ibrahim Díaz o la joven promesa Gonzalo García para iniciar el encuentro. En el extremo izquierdo, se mantiene la competencia entre Vinícius Júnior y Rodrygo, con indicios que apuntan a que Rodrygo podría salir de inicio tras que Vinícius haya disputado tres partidos consecutivos como titular.

Además del reto técnico, el calendario aprieta: viaje prolongado y cansancio acumulado pueden influir en el rendimiento. Sin embargo, la realidad de la competición exige objetivo claro: sumar puntos en Kazajistán y mirar con claridad la siguiente jornada frente a la Juventus.

La expedición a Almaty incluyó a varias figuras jóvenes para compensar las bajas, entre ellas Javi Navarro, David Jiménez, Kareiras, Arda Güler y Mastantuño, junto con Mbappé e Endrick, que podrían iniciar desde el banquillo. Aunque se le considere favorito teóricamente al Real Madrid, Kaïrat Almaty persigue una sorpresa para su afición, cimentada en la motivación de jugar en casa y en la atmósfera del estadio Central.

Como siempre, estos duelos traen su cuota de dificultad imprevista: la exaltación del rival, las condiciones climáticas y el propio estado del césped pueden condicionar el desarrollo del partido. Madrid llega con la presión de las bajas: Carvajal, Militao, Rudiger y Mendy fuera por lesión, y Carvajal sancionado en competición europea tras la expulsión frente al Marsella en la primera jornada.

Aun así, el nombre del Real Madrid y el espíritu de la Copa siguen empujando: la Champions no perdona tropiezos y cada acción cuenta en la carrera por el título europeo, especialmente cuando una victoria podría allanar el camino hacia la siguiente fase y la defensa del orgullo blanco.

La respuesta a si el Real Madrid conseguirá superar la crisis del derbi con una victoria en Almaty la dirán 90 minutos intensos. En cualquier caso, la ambición permanece intacta: los madridistas confían en además de sumar puntos, proyectar una imagen de fortaleza ante la adversidad.

Punchline 1: Si Alonso quiere precisión, que traiga un GPS para el balón; si falla, al menos que el banquillo regale una sonrisa. Punchline 2: Y si todo falla, recuerda: en la Champions nadie regala nada, pero al menos la grada te da la mejor risa con el deportivo humor del día.