Tres días de duelo para Zamalek: homenaje y respaldo a la familia de Mohamed Sabry
14 noviembre 2025
Contexto y homenaje
El consejo directivo del Zamalek, encabezado por el capitán Hussein Labe, anunció este viernes una serie de medidas tras la trágica muerte de su ex estrella Mohamed Sabry, ocurrida en un accidente de tráfico en la zona del Fifth Settlement, al este de El Cairo.
Se declaró un periodo de luto de tres días dentro de la sede del club y se rindió homenaje a una carrera de muchos años de entrega y lealtad.
También se convocó un funeral oficial para el domingo en la sede del club para que la afición y la familia puedan despedirse colectivamente.
Además, se informó de un apoyo económico permanente a la familia del fallecido, que incluye una pensión mensual y la continuidad del salario del exjugador a través de la gestión de la cadena del club, como reconocimiento a su trayectoria en los medios deportivos tras su retirada.
El club afirmó que estas decisiones reconocen la trayectoria de Sabry y sus logros que dejaron huella en la historia del club, tanto como jugador de la generación dorada, como entrenador y analista en la cadena del club, combinando lealtad y profesionalidad.
Trayectoria y legado de Mohamed Sabry
Nacido en 1974, Sabry fue uno de los pilares de la generación dorada del Zamalek a finales de los 90 y principios de los 2000. Inició su carrera en 1993 como mediocampista creativo, famoso por sus regates y visión, y sumó 15 títulos, entre ellos dos ligas, dos Copas de Egipto, tres Supercopas y conquistas continentales, destacando tres veces la Champions League Africana y otros trofeos.
Tras un breve paso por el Kazma de Kuwait, regresó a Egipto para jugar con el Al-Ittihad de Alejandría, y más tarde se retiró para dedicarse a la dirección técnica y al descubrimiento de talentos, llegando a descubrir al futbolista Mustafa Fathi.
En los últimos años trabajó como presentador y analista en la cadena del Zamalek, mostrando una combinación de pasión por el club y profesionalidad, convirtiéndose en una voz respetada sin faltar al respeto a sus rivales. Su amor por el club fue inquebrantable; incluso rechazó una oferta del Al Ahly en 1996.
Detalles de la muerte: Sabry falleció en las primeras horas de la mañana tras chocar su coche contra una pared de un edificio en construcción en el Fifth Settlement, dejando un vacío en el fútbol egipcio y en la historia del Zamalek.
Reacciones del mundo deportivo: Miembros del club y excompañeros expresaron su dolor. Nira Al-Ahmad, miembro de la junta, escribió emotivas condolencias en redes sociales. Hazem Emam, exjugador del Zamalek, y otros íconos como Shikabala y Jamal Hamza también expresaron su pesar, destacando su lealtad y sus contribuciones.
Sabry será recordado como un símbolo de entrega y fidelidad, cuyo legado se extiende más allá del terreno de juego, abarcando su periodo como entrenador y rostro analítico en la televisión del club.
Llave de su historia
Su trayectoria dentro del club, junto a compañeros como Ahmed El-Kass, Ayman Mansour, Khaled El-Ghandour e Ismail Yusuf, lo consolidaron como parte de la generación dorada del Zamalek y como ejemplo de lealtad.
Detrás de la muerte
El fallecimiento de Sabry produjo una ola de dolor en la escena deportiva y una ola de mensajes conmovidos de figuras públicas y afición, que siguen recordando al jugador por su ética y su impacto en el club.
Reacciones destacadas
Los mensajes de apoyo y condolencias de figuras del club y excompañeros se sucedieron, subrayando su legado dentro del Zamalek y su influencia en múltiples generaciones de aficionados.
El club anunció además que mantendrá vivo su legado mediante iniciativas internas y el reconocimiento de su aporte a lo largo de los años, siempre con la mirada puesta en la comunidad de seguidores y en la historia de la institución.
Detalles finales
La noticia fue tratada con solemnidad, y el club invitó a la afición a unirse en los actos de memoria, que incluyen un funeral oficial y un programa de homenaje diseñado para respetar la memoria del jugador y su impactante carrera.
Si el dolor tiene un gol, Sabry ya dejó el suyo: un legado imborrable. Y si el marcador se bloquea, al menos sabemos que el corazón del Zamalek sigue regateando la tristeza con orgullo.
Si la vida te regala un balón, haz un regate elegante; si te regalan un lunes gris, que el regate sea para convertirlo en martes de triunfo.