Bellingham desafía al Barça: quiere asegurar el Clásico y dejar atrás los errores del pasado
25 octubre 2025
Antes del Clásico: Bellingham a tope tras regresar de la lesión
Horas antes del Clásico entre Real Madrid y Barcelona, Jude Bellingham habló con confianza sobre su estado físico y su preparación para el encuentro, que considera "el partido más grande del mundo". Asegura vivir su mejor forma desde la operación de hombro sufrida el verano pasado y afirma estar listo para ayudar al equipo a ganar y mantener el impulso logrado durante su ausencia.
La recuperación y las palabras del jugador
El inglés, de 22 años, declaró al sitio oficial del Real Madrid que se siente en una gran fase, ya recuperado y acercándose a su nivel real. En los últimos partidos previos al parón, frente a Getafe y Juventus, empezó a notar una mejoría importante y afirmó estar más fuerte y positivo que nunca.
Según el diario AS, su proceso de reacondicionamiento ha sido gradual tras la operación de hombro y se siente más cerca de su mejor versión para afrontar los retos de las próximas semanas.
Llaves para la victoria y equilibrio mental
Respecto al plan para vencer al Barcelona, Bellingham habló con una claridad táctica notable: lo esencial es gestionar el partido, sus momentos y las emociones. En la campaña pasada, cuando llegaban momentos de desajuste, nos veíamos obligados a reaccionar; ahora debemos mantener la cabeza fría durante 90 minutos y sabemos perfectamente cómo juegan los blaugranas. La clave está en la gestión de nervios, presión y del ambiente; esos detalles pueden marcar la diferencia.
La idea central es mantener el balón, presionar en fase alta y evitar pérdidas que compliquen la salida. En palabras del propio Bellingham, la paciencia y la concentración serán determinantes para no perder el control del encuentro.
El Clásico: prueba psicológica y temporada
El internacional inglés subrayó que el Clásico no se mide solo en tres puntos, sino en su efecto en el ánimo del equipo y en la confianza para el resto de la campaña. También habló del ambiente del estadio Santiago Bernabéu: cada vez que pisa el césped, siente una mezcla de emoción y respeto, y confía en contrarrestar la energía de la afición contraria para responder al reto con actuaciones destacadas.
Uno de los mejores partidos del mundo. Bellingham ha confesado su admiración por este clásico desde su niñez y resaltó que, a pesar de algunas decisiones difíciles en el pasado, la posibilidad de enfrentarse a Barcelona en casa siempre le genera una motivación especial.
En cuanto a la visión inglesa, indicó que en su país todos reconocen la magnitud de este choque y que, aunque existan otros clásicos y derbis, este encuentro mantiene un peso único por la historia y el nivel de los protagonistas. Es, para él, una ocasión clave para confirmar su crecimiento.
Final de 2025: momentos turbulentos y la vuelta al rumbo
La recta final de 2025 fue convulsa para Real Madrid: Ancelotti pareció quedarse sin ideas y Mbappé no logró el impacto esperado, mientras Vinícius Jr. mostró señales de caída de rendimiento. El entrenador probó un 4-4-2 con Bellingham jugando más atrás, pero los resultados no acompañaron y la crítica se intensificó.
La razón principal de ese bache fue que Bellingham jugaba lesionado; durante su primera temporada en Madrid se dobló el hombro en dos ocasiones, y llevó vendas durante meses, posponiendo la cirugía para Euro 2024. En verano se optó por la intervención quirúrgica para una recuperación definitiva, y pese a participar en la Copa Mundial de Clubes en EE. UU., su rendimiento no terminó de volver a su pico.
Ahora, tras meses de descanso y rehabilitación, Bellingham llega con nuevo foco y madurez. Ya no es sólo una promesa: es un líder que entiende el valor de los detalles en los grandes partidos. El Clásico no es solo una prueba; es una etapa decisiva para lo que viene.
Si Real Madrid necesita al Bellingham de verdad para liderar la era post-Ancelotti, el inglés también necesita el Clásico para reafirmar su lugar entre la élite. Como él mismo ha dicho: "Estos encuentros no dan puntos solamente, dan la confianza para afrontar toda la temporada con la misma pasión".
Y para cerrar con humor ligero: si el fútbol fuera una caza, Bellingham ya habría hecho blanco… y sin necesidad de mirar por la mira. Y si el Clásico termina en empate, que nadie se preocupe: la prensa tendrá su bala de chistes para la próxima rueda de prensa.