Gasperini y la Roma: ¿el despertar de un gigante romano?
11 noviembre 2025
Trayectoria de Gasperini
Después de convertirse en una leyenda en Bergamo con Atalanta, el entrenador Gian Piero Gasperini elevó las aspiraciones de la Roma desde su llegada en el verano, tras un inicio impresionante con el equipo.
Gasperini (67 años) ha pasado por muchos clubes en Italia y ha probado de todo, hasta alcanzar la cima en los últimos años tras un inicio discreto y un camino complejo en Inter de Milán.
Y si Roma ha sufrido en los últimos años, esta temporada el equipo ocupa el segundo lugar tras 11 jornadas, con 24 puntos, empatando con el líder Inter y a solo diferencia de goles.
El equipo se destaca por ser la defensa más sólida de la competición este curso, con solo 5 goles en contra, reflejo de la solidez defensiva bajo su mando.
Inter y la trayectoria que marcó su carrera
La trayectoria de Gasperini como entrenador en Inter de Milán estuvo marcada por una experiencia que terminó de forma abrupta hace 14 años: fue destituido tras apenas 10 semanas, pero luego resurgió y se convirtió en una de las referencias del fútbol italiano y europeo.
En su día, algunos analistas dijeron que tenía talento, pero que quizá no era el adecuado para uno de los clubes más grandes de Italia; era un hombre que luchaba por títulos en ligas regionales, pero no era un serio aspirante al Scudetto.
Aquel día marcó su carrera; un astro en ascenso que rozó la luna y luego emprendió un lento proceso para recuperar su reputación y volver a estar entre los grandes.
El reto imposible
Su llegada al Inter en el verano de 2011 coincidió con una fase de transición para el club que había ganado la triple corona con Mourinho en 2010.
El equipo atravesó un periodo de transición bajo la tutela de Rafa Benítez y luego Leonardo, hasta que Gasperini tomó las riendas, con resultados que fueron prácticamente catastróficos durante sesenta y setenta días.
Atalanta: estabilidad y triunfo
Tras su trabajo en la cantera de la Juventus, Gasperini inició su carrera en la primera división con Crotone y luego Genoa, disputando cerca de 200 partidos y ganándose una reputación por su estilo de juego atractivo y expansivo.
Gracias a su defensa de tres centrales y a su ataque organizado, llevó a Genoa a competir en competiciones europeas y a convertirse en una de las promesas de la escena italiana.
Muchos jugadores y entrenadores brillan lejos de las luces, y fue el momento para Gasperini de construir un equipo destacado que, pese a cambios de jugadores a lo largo de los años, mantuviera resultados de alto nivel, aunque no fue fácil tras experiencias en Palermo y Genoa.
Atalanta: estabilidad y triunfo con el tiempo
En el verano de 2016 comenzó una historia que lo consolidó como nombre conocido en Europa: con tiempo y recursos, Atalanta se convirtió en un equipo fiable, con identidad y ambición.
Aunque los cambios de plantilla fueron constantes, el equipo mantuvo resultados notables, logrando la Europa League y otros logros históricos, acompañados de una buena cantidad de resultados durante gran parte de la década bajo su dirección.
Durante ese periodo, el equipo soñaba con ganar el Scudetto, pero lo más cercano fue un par de terceros puestos.
Este verano, Gasperini dio el salto a un club más grande: Roma, un movimiento que supuso un beneficio para él y una pérdida para Atalanta.
Roma y Gasperini: inicio prometedor
La filosofía de Gasperini requiere tiempo para implementarse por completo, y eso invita a esperar una temporada divertida en el Olímpico para los aficionados.
Por su parte, Atalanta, bajo la dirección de Ivan Juric, enfrenta dudas sobre su continuidad, con resultados variables y rendimiento irregular.
La pelea por el Scudetto
Después de un inicio irregular la pasada campaña bajo Claudio Ranieri y luego Juric, el equipo se reavivó bajo la tutela de Gasperini: una muestra de que el equipo puede competir si arranca fuerte.
Hoy, Roma, bajo Gasperini, es uno de los equipos más fuertes de Italia tras 11 jornadas, con 24 puntos y empate a la cabeza con Inter, y solo la diferencia de goles decide.
Además, la Roma es la defensa menos goleada de la temporada, con solo 5 tantos encajados, un dato que ilustra la solidez defensiva.
Si Gasperini logra guiar a Roma a la conquista del Scudetto, podría convertirse en el entrenador más destacado de la historia de los lobos romanos.
Punchlines finales: si Roma gana el Scudetto, la ciudad dirá que el tiempo de espera valió la pena y que el Olímpico ya tiene permiso para hacer chistes de tácticas. Y si no, al menos la defensa ya demostró que sabe guardar la marcha en momentos clave.