Japón sorprendió a Brasil al vencer 3-2 en un amistoso disputado en Tokio, logrando su primera victoria histórica ante la Verdeamarela en 14 encuentros.
Brasil parecía encaminado a un triunfo cómodo tras un primer tiempo dominante, con goles de Paulo Henrique (26) y Gabriel Martinelli (32).
Pero Takumi Minamino inició la remontada (52), seguido por Kito Nakamura (62) y Ayase Oida (71), que dejó el marcador 3-2 para Japón.
Notas tácticas
Con el partido en marcha, Ancelotti introdujo cambios: dejó a los goleadores de la última cita en el banco y alineó a Martinelli y Henrique junto a Vinícius Júnior en el ataque. Japón, por su parte, tuvo bajas por lesión como Kaoru Mitoma y Wataru Endō.
Este resultado llega tras una fase de ajustes para Brasil tras el inicio de la era Ancelotti, y tras goleada 5-0 a Corea del Sur en un amistoso reciente. Brasil y Japón ya estaban clasificados para el Mundial 2026, pero este resultado cambia sensiblemente el tono de la preparación.
La historia entre ambas selecciones es larga: desde 1989 se han medido 14 veces, con la última victoria japonesa que marca una nueva etapa en el desarrollo del fútbol asiático frente a una potencia histórica de América. A lo largo de los años, Japón ha ido acercándose a los grandes, mientras Brasil mantiene su dominio en la mayoría de los duelos.
Ancelotti: un ciclo de cambios
Desde mayo de 2025, Ancelotti dirige a Brasil, buscando revertir una trayectoria irregular en las eliminatorias. En los últimos meses, el equipo ha mostrado detalles de mejora: 0-0 ante Ecuador, 1-0 ante Paraguay y 5-0 ante Corea del Sur, antes de caer ante Japón.
El choque también subraya las áreas de oportunidad para consolidar un proyecto que pueda llegar con fuerza al Mundial 2026.
Remate y humor
Con este episodio, Brasil aprendió una nueva lección: a veces el balón tiene más imaginación que sus delanteros. Y para cerrar con humor: punchline 1: "Brasil tiene talento, pero Japón tiene plan de juego... y plan de juego que funciona." punchline 2: "Si Brasil quiere volver a ganar, que lleve al entrenador de vuelta a casa y traiga el sol de Tokio. De nada."