Aballou: Un sitio hecho por fans, para fans

La gran prueba de Ahmed Abdul-Raouf: ¿Puede el Zamalek romper la maldición en la Súper Egipcia?

6 noviembre 2025

La gran prueba de Ahmed Abdul-Raouf: ¿Puede el Zamalek romper la maldición en la Súper Egipcia?
El camino hacia la final comienza en Abu Dabi con Abdul-Raouf al mando del Zamalek.

Contexto y rivalidad

Esta noche, la afición del fútbol egipcio dirige su mirada al Estadio Al Nahyan de Abu Dabi, donde se disputará la semifinal de la Súper Egipcia entre Zamalek y Pyramids. Un encuentro que promete emoción y un choque de identidades entre un club con historia y un aspirante reciente a la élite.

El encuentro tiene una importancia máxima para ambos equipos: el Zamalek busca reafirmar su tradición y su palmarés, mientras que el Pyramids intenta continuar su avance notable y sumar otro título a su corta pero ambiciosa historia.

En la edición de la Súper Egipcia, que se disputa en la capital de los Emiratos, destaca la designación de Ahmed Abdul-Raouf como técnico del Zamalek, convirtiéndose en el tercer entrenador egipcio en dirigir al club en esta competición decisiva.

Esta misión no es solo un reto táctico; es una inmersión en el legado nacional, con un historial de triunfos y derrotas que pesan en el rendimiento de cada entrenador y de cada convocatoria.

Entre la historia y la actualidad

Tradicionalmente, el Zamalek ha confiado en entrenadores extranjeros para la Súper, pero la historia también guarda dos capítulos con entrenadores egipcios que dejaron huella. En 2014, Hossam Hassan guió al equipo frente al clásico rival y cayó ante el Al Ahly en penales; en 2017, Mohamed Helmy logró levantar la copa ante el mismo rival en una final reñida, también resuelta desde los once metros. Esos episodios siguen inspirando a la afición y a la dirección deportiva.

Una oportunidad excepcional

Hoy, Abdul-Raouf se sitúa como el tercer entrenador egipcio que asume el mando de Zamalek en la Súper, pero con una diferencia clave: la expansión del formato a cuatro equipos (Al Ahly, Zamalek, Pyramids y Cerámica Cleopatra). El plan es claro: semifinal ante Pyramids y, si se avanza, una final o un partido por el tercer lugar el domingo siguiente, con la motivación de demostrar que la dirección nacional puede competir al más alto nivel.

Este contexto plantea un desafío doble para Abdul-Raouf: demostrar su valía ante una afición exigente y, al mismo tiempo, presentar una idea táctica que haga valer la identidad del Zamalek ante un rival sólido como Pyramids. El resultado podría definirse en detalle estratégico y en la capacidad de mantener la serenidad bajo presión.

En el plano histórico, la rivalidad entre Zamalek y Pyramids se enriquece con el paso de los años. El historial de enfrentamientos, que suma varias decenas de duelos en distintas competiciones, muestra un predominio del color blanco en ciertos contextos y un dinamismo creciente del otro club en los últimos años, lo que augura un partido de alta intensidad.

Los números dicen más que las palabras

Hasta ahora se han disputado 23 encuentros entre ambos clubes, con Zamalek ganando 10 veces, Pyramids 3 y 10 empates. Estas cifras reflejan una paridad que podría romperse en Abu Dabi si el equipo de Abdul-Raouf logra una puesta en escena convincente y una ejecución precisa en los momentos clave de la semifinal.

La expectativa también se centra en el rol de Zamalek como equipo que mira hacia el futuro con una dirección nacional, y en si esa claridad de propósito se traducirá en resultados inmediatos frente a un Pyramids que ha construido una identidad sólida en esta nueva era del fútbol egipcio.

La próxima hora del duelo no solo define una plaza para la final, sino que envía un mensaje sobre cómo se concibe la competencia entre clubes de un mismo país en una competición que tiene un peso significativo para la afición y la historia del fútbol egipcio.

La cita es, en definitiva, una oportunidad para que el Zamalek demuestre que puede sostenerse con una gestión interna y que la identidad nacional puede sostenerse frente a las potencias tradicionales y a los proyectos ambiciosos que han marcado la modernización del fútbol en Egipto.

El triunfo en este choque podría abrir la puerta a una final esperada con el objetivo claro de sumar un título más a la rica historia del club, mientras que una derrota dejaría preguntas sobre la fase actual y la continuidad del plan de Abdul-Raouf dentro de la estructura del club.

Junto a la mirada táctica, la prensa y la afición esperan anécdotas, estadísticas y momentos que alimenten la historia del fútbol egipcio, una historia que continúa escribiéndose con cada partido y con cada decisión tomada en la banda técnica.

Ganar o perder, lo único definitivo hasta ahora es que se ha encendido otra vez la chispa de una rivalidad que trasciende generaciones y que, para muchos, está llamada a definir a la próxima camada de protagonistas del fútbol en Egipto.

El estadio, la afición y la presión de la historia se combinan para que esta semifinal no sea una simple entrega de puntos, sino un capítulo que podría influir en el rumbo del Zamalek a medio plazo.

El camino hacia la final exige concentración, paciencia y la capacidad de convertir las oportunidades en goles, algo que Abdul-Raouf deberá equilibrar con la presión de dirigir en una competencia tan emblemática y exigente.

En definitiva, las imágenes de Abu Dabi podrían quedarse en la memoria como el inicio de una nueva era para el Zamalek bajo una dirección nacional, o como un capítulo más en una saga histórica de rivalidad que continúa escribiéndose con cada balón que circula entre el césped y las tribunas.

Punchline final: Si el balón no quiere entrar, que entre la buena vibra del vestuario; el banquillo aún tiene asiento.

Punchline 2: Este partido está tan tenso que hasta el reloj pidió tiempo extra para respirar.

Autor

Avatar

Aris Fiparis

Soy Aris Fiparis, periodista deportivo español nacido en 1991. Apasionado de la fotografía analógica, la escalada en roca y la cocina molecular, comparto mi visión sensible del deporte.

Preguntas frecuentes

¿Quién dirige al Zamalek en la Súper Egipcia?

Ahmed Abdul-Raouf, en condición interina, asume la dirección técnica del club para este torneo.

¿Cuántos equipos participan y cuál es el formato?

Participan cuatro equipos: Zamalek, Pyramids, Al Ahly y Cerámica Cleopatra; se juegan semifinales y una final o partido por el tercer lugar el domingo.

¿Qué entrenadores egipcios han liderado al Zamalek previamente en la Súper?

Hossam Hassan (2014) y Mohamed Helmy (2017) protagonizaron capítulos decisivos, ambos ante Al Ahly, con resultados que quedaron en la memoria de los aficionados.