La inesperada jugada de Manchester United: rumores de venta y un plan a largo plazo
9 octubre 2025

Actualización sobre el posible venta del Manchester United
En las últimas horas circulan fuertes rumores sobre la posible venta del Manchester United, noticia que agita el mundo del fútbol inglés, aunque la entidad asegura no tener conocimiento de conversaciones de adquisición.
Estas informaciones emergen tras una publicación en redes del asesor Turki Al-Sheikh, presidente de la Autoridad General de Entretenimiento de Arabia Saudita, quien insinuó que el club estaba “en una etapa avanzada de negociaciones” para venderse a un nuevo inversor, desatando especulaciones en Reino Unido y más allá.
Al-Sheikh escribió en sus redes: “La mejor noticia de hoy es que el Manchester United está en una etapa avanzada de completar la venta a un nuevo inversor... Espero que sea mejor que los propietarios anteriores.”
El club, citando informes de prensa, indicó que no ha recibido aviso oficial ni interna sobre ninguna negociación de venta, y que no hay confirmación de conversaciones en curso.
Si bien Al-Sheikh es conocido por sus conexiones en el mundo deportivo y por la organización de grandes eventos, las fuentes cercanas señalan que sus contactos con el United se limitan, por ahora, a la posibilidad de organizar un amistoso durante la temporada en Arabia Saudita.
Por su parte, el británico Sir Jim Ratcliffe, que posee un 27,7% de las acciones en una operación de 1.300 millones de libras con la familia Glazer, cuenta con un acuerdo que incluye una cláusula llamada “derecho de arrastre” o drag-along, que podría facilitar una venta total bajo ciertas condiciones.
Dicho acuerdo entró en vigor el 13 de agosto y, en la práctica, permite a la familia Glazer negociar la venta del club sin requerir consentimiento de Ratcliffe, si se cumplen ciertos plazos y circunstancias.
En este marco, no existen pruebas concluyentes que respalden las afirmaciones de Al-Sheikh, y la prensa británica sigue reportando posibles conversaciones sobre una hipotética gala o partido en Riyadh, frente a equipos saudíes de renombre o un encuentro frente a ex estrellas de la liga local.
Se especula incluso que la negociación podría generar más de 10 millones de libras para organizar un choque de alto perfil, una oportunidad atractiva para reforzar ingresos en un año complicado desde lo deportivo y financiero.
Desde que Ratcliffe asumió la gestión parcial, se han implementado recortes significativos en el gasto, con la salida de unos 450 empleados. En su entrevista en el podcast “The Business Podcast”, Ratcliffe explicó que los costos eran elevados y que la burocracia, más que la calidad del equipo, fue un obstáculo importante. “No voy a prometer almuerzos gratis a vida”, dijo entre risas, para subrayar que la meritocracia y la rentabilidad deben guiar la gestión.
Además, afirmó que la relación entre resultados y liquidez es crucial: cuanto mayor es la liquidez, mayor capacidad hay para construir un equipo competitivo. El objetivo es sentar una base sólida y sostenible para el club a largo plazo.
En el plano financiero, Manchester United reportó ingresos récord de 666,5 millones de libras para el año fiscal que terminó en junio de 2025, aunque registró una pérdida de 33 millones por la ausencia en la Liga de Campeones y los costos de reestructuración.
Ratcliffe reiteró que no se verán todos los frutos de la reestructuración en los resultados actuales, dada la ausencia continental, pero confía en que las cifras mejorarán y que el club podría convertirse en el más rentable del mundo, sentando las bases para un proyecto deportivo de alto rendimiento y sostenibilidad.
A nivel deportivo, el United cerró la temporada pasada en la decimoquinta posición de la Premier League, con críticas al técnico portugués Rubén Amorim, que sumó 37 puntos en 34 jornadas. Aun así, Ratcliffe sostiene que se debe brindar al entrenador el tiempo necesario para demostrar su valía, negando decisiones apresuradas ante la presión mediática.
El ambiente en Old Trafford parece un cruce entre rumores de venta y una estrategia de reducción de costos, mientras la dirección intenta avanzar hacia un proyecto deportivo estable y rentable a largo plazo. Aún no queda claro si la familia Glazer activará un nuevo plan de venta o si el club logrará consolidar su crecimiento dentro de la Premier.
En resumen, la pelota está en el aire: mientras el club persigue un equilibrio entre liquidez y rendimiento, la pregunta clave sigue siendo si aparecerá un inversor dispuesto a apostar a un Manchester United en transición hacia la rentabilidad sostenida. Y ya que hablamos de fútbol, recuerden: si la venta se demora, siempre queda el consuelo de que los trajes de la directiva no se quedan sin humor; después de todo, el fútbol es más emocional que un marcador de inflación. Y si todo falla, siempre quedará la opción de vender camisetas con descuento para cubrir las pérdidas. ¡Al menos el merchandising no se queja de recortes!