Milán rompe la defensa de Roma: Leao y Nkunku llevan a Milan en San Siro con una victoria 1-0

Resumen del partido

El Milan consiguió una victoria clave 1-0 frente a la Roma en San Siro. La jugada decisiva llegó en una contra bien ejecutada cuando Leao filtró un pase hacia la izquierda y Pavlovic remató para batir al portero. Roma dominó gran parte de la primera mitad, pero el conjunto rossonero aprovechó su llegada al arco para desequilibrar el encuentro. En la segunda mitad, Milan creó más oportunidades y conservó el marcador a pesar de la presión rival, con Maignan destacando en la portería al detener un penal de Dybala.

La defensa defendió con orden y el equipo logró contener las embestidas del Roma, manteniendo el resultado y gestionando los minutos finales con seriedad táctica. En resumen, un choque muy cerrado que se decantó por la efectividad de la contra y la disciplina defensiva del Milan.

Reacciones y claves

Allegri explicó que los primeros 35 minutos fueron de dominio de Roma y que el Milan supo ajustarse tras el descanso, recurriendo a una distribución de cuatro mediocentros para presionar más y aprovechar las transiciones. La ausencia de varios efectivos llevó a una dupla ofensiva renovada entre Leao y Nkunku, que aportó mayor movilidad y desequilibrio en ataque.

Leao afirmó que el esfuerzo es del equipo y que la prioridad es trabajar para la causa, mientras Nkunku aportó profundidad y presencia en el área. Maignan elogió el espíritu competitivo de su plantel y valoró la parada clave ante el penal, que permitió sostener la victoria. Con este resultado, Milan sube a la tercera posición y Roma se mantiene cerca, con Napoli aún liderando la tabla en la lucha por el Scudetto.

Notas finales con humor
Si este Milan quiere conquistar la liga, la receta es simple: buena defensa, ataques rápidos y una pizca de magia de Leao. Y si la chemise no funciona, siempre quedan las contras para escribir la historia. Punchline final: la única contraseña que necesitan es Milan, es decir, más Milan que miedo a otra defensa enloquecida. Otra: si el calendario fuese un videojuego, Milan ya estaría en modo experto y Roma en modo jefe aburrido.