Al Ahly enfrenta una nueva embestida: lesión de Shahat desborda al club y cambios estructurales en el horizonte

Lesión de Hussein Shahat y su impacto

El Al Ahly de Egipto recibió una nueva mala noticia cuando se confirmó que Hussein Shahat estará fuera de las canchas entre siete y ocho semanas tras sufrir una lesión muscular durante un partido de la décima jornada del campeonato. El doctor Ahmed Gaballah indicó que se trata de un desgarro en el tendón de la musculatura posterior del muslo y que el periodo de recuperación no debe ser inferior a siete semanas.

Según Gaballah, el protocolo de tratamiento se realiza bajo supervisión médica con la esperanza de que el jugador regrese a los entrenamientos antes de que termine el año si todo evoluciona favorablemente.

Una fuente dentro del club señaló que la ausencia podría extenderse a dos meses, lo que agrava la carga de trabajo del equipo y añade presión al cuerpo técnico, ya de por sí con un horizonte competitivo exigente.

Caída de jugadores y respuesta del club

La lesión de Shahat desató una oleada de frustración en las instalaciones del club, en medio de una racha de lesiones que han afectado a varios titulares en las últimas semanas. En la última edición del Derby ante el Zamalek, el equipo tuvo que afrontar el encuentro con siete ausentes, entre ellos Mohamed Shukri, Ashraf Dari, Karim Fouad, Ahmed Zizou, Mohamed Magdi Afsha, Jenique Gardidar y Imam Ashour, este último afectado por un virus.

Diversos jugadores han sido baja por problemas musculares en las últimas jornadas, y algunos sectores del club cuestionan la gestión de la preparación física y la alimentación de los jugadores, contexto que ha aumentado la incertidumbre sobre la continuidad de varios de ellos en el once titular.

Entre las ausencias destacadas también se mencionó que Mohamed Shukri, Karim Fouad, Ashraf Dari, Ahmed Rida y Jenique Gardidar no pudieron competir ante el Ismaili en la última jornada, y otros nombres como Omar Kamal Abdul Wahid, Ahmed Nabil Koka, Mohamed Ali Ben Ramadan, Taher Mohamed Taher, Yasser Ibrahim y Yassin Marai han estado fuera en distintos momentos por razones musculares.

Plan de reformas y dirección técnica

El club aprovecha la ventana de pausa internacional para evaluar de forma integral el estado físico y médico de la plantilla. Según fuentes cercanas, existe interés en renovar por completo el cuerpo médico, incorporando a un nutricionista extranjero y un entrenador de cargas, además de evaluar la contratación de un experto médico extranjero con experiencia en grandes clubes europeos. Aunque las negociaciones se han visto limitadas por la situación económica, la dirección considera que la inversión en lo médico es crucial para mantener la competitividad.

En paralelo, la entidad confirmó el nombramiento del entrenador danés Yas Sorob como director técnico del primer equipo por un periodo de dos años y medio. Osama Hilal, quien lidera las gestiones de contratación, cerró los detalles administrativos y financieros tras consultas con la directiva y el comité de planificación, con la esperanza de iniciar una etapa más estable tanto en lo deportivo como en lo humano.

El club apunta a una reorganización que permita un control más riguroso de las cargas físicas y una mayor regularidad en los procesos de rehabilitación, a la vez que se refuerza con un fútbol más sostenible a nivel físico y mental para afrontar la fase decisiva de la temporada.

Conclusiones y próximos pasos

Las autoridades del club confían en que Sorob aporte estabilidad y un nuevo impulso técnico y físico, complementando los cambios en el área médica y de alimentación. Aunque quedan dudas sobre el calendario exacto, la dirección deportiva prevé que los próximos meses traerán una respuesta más clara sobre recuperaciones y refuerzos.

Y para terminar, dos punchlines que no curan lesiones pero sí son útiles para las canchas: 1) Si la salud fuera una táctica, el Al Ahly ya tendría nota diez… en la risa de los médicos. 2) El único desgarro permitido aquí es el de la humorística, porque a fin de cuentas, el balón sigue rodando y la plantilla tiene más vueltas que un balón de playa en agosto.