Barcelona vs PSG: remontadas legendarias y venganzas que encienden la Champions
30 septembre 2025

Contexto histórico y antecedentes
Este miércoles, el FC Barcelona recibe al Paris Saint‑Germain en Montjuïc, en la segunda jornada de la fase de grupos de la UEFA Champions League.
No es un simple encuentro: es una historia de remontadas, traiciones pasadas y duelos que han marcado el camino de ambos clubes.
Tras un inicio de temporada prometedor, Barcelona venció 2‑1 a Newcastle y PSG goleó 4‑0 a Atalanta, llegando al partido con confianza, pero también con tensiones acumuladas que podrían aflorar en la cancha.
Los aficionados recuerdan la remontada de 2017, cuando un 0‑4 en la ida se convirtió en 6‑1 en la vuelta, un hito que sigue citándose como símbolo de ambición barcelonista.
Aquel verano Neymar dejó Barcelona para fichar por el PSG, una operación que muchos interpretaron como una venganza deportiva desde la capital francesa.
La tensión continuó con intentos de fichajes cruzados, como la tentativa de Barcelona por Verratti y la respuesta del PSG, mientras Messi cerraba un capítulo en Barcelona y abría otro en París en 2021.
En primavera de 2024 se cruzaron nuevamente en cuartos de final, sumando capas de dramatismo que elevan la expectación para este encuentro. La presencia de Luis Enrique en el banco de PSG añade un matiz más a la historia.
Este curso la ausencia de Neymar y Messi ha suavizado la carga emocional, y Enrique —una figura clave en París— regresa a Barcelona con un tinte de respeto mutuo. Además, la visita del presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, a Barcelona por primera vez desde 2021 se interpreta como un signo de normalización de las relaciones entre club y UEFA.
Se comenta incluso la posibilidad de excepciones para que Barcelona pueda regresar a jugar en su estadio habitual en las rondas siguientes, pese a las reglas que rigen la competición.
Duelo de talentos y tácticas
La emoción del encuentro no se reduce a la historia; también se libra en el césped con duelos que pueden decidir el curso del partido.
Entre los protagonistas, Pedri, joven talento de Barcelona, frente a Vitinha, el centrocampista portugués de PSG, simbolizan la lucha entre creatividad y control en el mediocampo.
En este contexto, Lamine Yamal contra Nuno Mendes promete dinamismo y desborde por las bandas, dos extremos que podrían desnivelar la balanza si aprovechan sus oportunidades.
Pedri, que en la última temporada dejó notas destacadas por su juego de pases y visión, busca consolidar su papel como referencia en La Liga y en Europa. Vitinha, por su parte, ha mostrado solidez defensiva y capacidad de lectura del juego.
La historia reciente también aporta a la conversación: Lewandowski y otros referentes de Barcelona siguen marcando la madurez del equipo, mientras Messi y Neymar, ya en capítulos separados, siguen siendo símbolos de una rivalidad que trasciende el tiempo.
La pareja de extremos de Barcelona, Lamine Yamal y la aportación de jugadores como Javi (Gavi) y Pedri, será clave para sostener la presión cuando PSG intente aprovechar las transiciones rápidas de su ataque. En defensa, la coordinación entre Araújo y los centrales será crucial para contener a un PSG que ha mostrado contundencia en las fases iniciales del curso.
Por su parte, el juego de Flick en Barcelona enfrentará su primer gran examen de la temporada, con ajustes necesarios tras las recientes ausencias de jugadores clave. En el bando parisino, Enrique deberá gestionar lesiones y descongestionar la plantilla para mantener la consistencia en una campaña exigente.
El choque también pone a prueba la versatilidad de las sedes: Montjuïc, con capacidad para alrededor de 55.000 aficionados, ofrece un ambiente distinto al Camp Nou, y el talento de los protagonistas podría convertirlo en un escenario único para una noche europea memorable.
Con 14 precedentes entre ambos clubes (con cinco victorias para cada uno y cuatro empates), el partido se perfila como una contienda abierta. Los analistas sitúan a Barcelona como favorito cercano con una probabilidad de victoria en torno al 45%, un empate alrededor del 25% y un triunfo parisino cercano al 30%.
La promesa del Montjuïc es intensa: el estadio temporáneo alberga a un público ansioso por ver si Barcelona puede volver a liderar la escena europea o si PSG mantiene su estatus de campeón continental.
Más allá de tres puntos, este encuentro será una prueba de aspiraciones: Barcelona quiere volver a la elite tras el impacto de su campaña anterior, mientras PSG busca consolidar su defensa del título europeo en un año en que la competencia no perdona errores.
En definitiva, este partido combina la historia de una rivalidad con el presente prometedor y la incertidumbre de cada balón dividido. Desde la remontada histórica hasta los duelos individuales, pasando por la astucia de Enrique y la resiliencia de Flick, todo invita a una noche para recordar.
Precisión milimétrica, pero la única bala permitida hoy es la de la risa: si la pelota entra, que lo haga con estilo y sin necesidad de repetir guiones.
Y si el partido se vuelca hacia la tensión, recuerda: en el fútbol como en la comedia, la mejor jugada es la que llega con un toque de humor y una pizca de suerte.