El Clásico que decidió el VAR: dos decisiones, dos polémicas y una victoria que calma a un Madrid en ascenso
27 octubre 2025
Detalles clave del Clásico y las decisiones del VAR
Un reporte de prensa española reveló las grabaciones de la tecnología de video en el Clásico entre Real Madrid y Barcelona. El encuentro presentó dos decisiones importantes corregidas por el árbitro César Soto-Grado, destacando la tensión entre Vinícius Júnior y Lamine Yamal y la jugada de mano de Eric García en la segunda mitad. Detrás de cada repetición, aparecía el eco de dos hombres mirando pantallas y decidiendo en milisegundos; sí, el VAR también tiene su dramatismo, y menos mal que no es un inicio de telenovela, porque aquí la decisión llega antes del descanso.
Según Mundo Deportivo, la primera incidencia ocurrió en los primeros minutos. El árbitro señaló penal a favor del Real Madrid tras un contacto entre Yamal y Vinícius. En ese instante, el asistente de VAR, Jorge Vigar Vazquez, intervino diciendo que se revisara la jugada para evaluar la posibilidad de anulación del penal. El mensaje fue claro: la imagen debe hablar por sí misma.
Durante la revisión, el VAR mostró dos imágenes que indicaban que Yamal pisa el suelo primero y que Vinícius impacta desde atrás. El árbitro declaró que no hubo falta de Yamal y que Vinícius fue el que provocó la caída de Lamine, por lo que se mantuvo la decisión de penal a favor del Madrid. En esa misma revisión, la sala de video dejó claro que la escena debía ser evaluada con calma y que la realidad se encontraba en varias tomas simultáneas.
El árbitro recibió apoyo desde la sala técnica: “La falta es correcta”, afirmaron. La emoción del momento terminó con un veredicto claro que cambió el inicio del partido a favor del conjunto blanco.
Reacciones, análisis táctico y lecciones para el futuro
En la segunda mitad, una jugada en la zona de Barcelona terminó en mano de Eric García. Al principio, Soto-Grado señaló saque de esquina, pero la intervención de la sala VAR, de nuevo, provocó una revisión adicional. Se mostró al árbitro la secuencia completa: la mano, elevada y en una posición que, para los técnicos de VAR, representaba una infracción. Tras analizar distintas tomas, el árbitro indicó que había penal, y la imagen final dejó claro que la mano de García modificó el curso del juego.
Las declaraciones posteriores reforzaron el tono del encuentro. Xabi Alonso, entrenador de Real Madrid, habló con serenidad ante los medios tras hacerse con tres puntos en un Clásico que, según él, tuvo momentos de gran intensidad y mérito colectivo. “Estoy muy contento por los jugadores; sabíamos que teníamos la capacidad de ganar ante un rival que sabe jugar al fútbol. Fue un triunfo merecido y, a veces, menos espectacular que el desarrollo, pero crucial para el futuro”, afirmó. Su mensaje fue claro: no hay liberación de presión, solo más trabajo y calma.
La conversación también abordó la tensión natural de este clásico: “Es normal, en cada Clásico hay momentos tensos y discutidos; lo importante es mantener la competición en un marco saludable”, añadió Alonso. En cuanto al rendimiento individual, alabó a Vinícius y, especialmente, a Jude Bellingham, destacando que el volante es un motor emocional y técnico para el equipo. “Bellingham tiene capacidad de decisión, influencia y esfuerzo; hoy dejó claro por qué es tan importante para nosotros”, sostuvo.
En términos tácticos, el Madrid mostró una mezcla de organización defensiva y ritmo en transición, con energía en las tribunas del Bernabéu que supo acompañar cada jugada. Aun así, el encuentro dejó claro que el VAR continuará marcando decisiones decisivas y que la relación entre afición, arbitraje y juego será objeto de disputa y análisis durante la temporada.
Conclusión: este Clásico no solo se definió en el césped, sino también en las salas de revisión. El episodio fortalece el mensaje de que el Real Madrid tiene un proyecto que evoluciona con cada partido, y que la presión y la emoción de jugar ante Barcelona se manejan mejor cuando el equipo demuestra carácter, unidad y fe ciega en la dirección técnica.
Y para terminar con el toque de humor: 1) Si el VAR fuera un bar, este Clásico estaría lleno: siempre hay alguien revisando y dos recargas de cafeína para sobrevivir a la jornada. 2) Y si la física del fútbol fuera un examen, el VAR sería ese profe que te dice: “mira las imágenes 17 veces, que hoy la nota depende de la repetición final”.