El Clásico que pone a Flick y Alonso en jaque: dos cerebros, una pelota y una apuesta de riesgo
25 octubre 2025
Detalles y táctica
El mundo del fútbol mira hacia el Clásico entre Barcelona y Real Madrid, el primero con Hansi Flick al mando del Barça y Xabi Alonso en el Real Madrid, un choque que se espera de gran inteligencia táctica antes del silbato inicial.
El partido no es solo entre estrellas; también es un duelo entre banquillos, donde Flick y Alonso buscan dejar su huella en este primer test en el gran escenario del Clásico.
Según Sport, el Clásico es uno de los encuentros más vistos de Europa y quizá del mundo, y la afición espera un choque de alto nivel que atraiga a aficionados de todo el planeta.
Para los jugadores, no se trata de un choque común; exige concentración y mentalidad al máximo, porque lo que está en juego va más allá de tres puntos, involucrando orgullo, confianza y la cohesión del vestuario.
Este encuentro representa un gran reto para ambos entrenadores: cada detalle cuenta, desde la alineación y lectura del partido hasta los cambios y la serenidad ante la adversidad, porque la calma transmite seguridad a los futbolistas.
En estas batallas, el factor local no decide todo; ambos equipos están habituados a la presión y el resultado depende de la combinación entre esfuerzo individual y espíritu colectivo, buscando un control del tempo y minimizando errores.
La batalla de detalles y táctica se decide en la circulación: defensa sólida, rapidez en el pase, decisiones entre talento individual y juego colectivo, y una finalización precisa. Se sabe que una chispa puede venir de una acción de Lamine Yamal, Pedri, Rashford, Güler o Bellingham, incluso sin dominio absoluto del partido.
Sport señalaba que el Barça mostró más empuje que PSG en la Champions, con mayor posesión y actitud positiva, mientras que el PSG terminó siendo algo más eficaz; esto invita a revisar la idea de “agudeza” en el rendimiento.
Ambos conjuntos llegan con victorias europeas y un ambiente mediático positivo; la confianza es notable pese a la presión que acompaña a un Clásico.
La estrategia del Madrid
Las preguntas clave giran en torno a la construcción del ataque, la alineación inicial y cómo gestionar las ausencias. Real Madrid, bajo Alonso, ha mostrado mejoras en la circulación y en la presión colectiva, con un bloque más cohesionado entre líneas y un compromiso sin balón que eleva la solidez defensiva, a pesar de momentos de desequilibrio que abren huecos.
Las dudas se centran en la frontalidad: si se juega con Güler en la banda derecha y Bellingham detrás de los delanteros, Barça deberá vigilarlos entre líneas, ya que su manejo podría limitar la peligrosidad de Vinícius y Rodrygo. Asimismo, la defensa podría verse afectada por la disponibilidad de Carvajal y Alexander-Arnold, lo que podría condicionar la profundidad por las bandas.
Se evalúa también la posibilidad de alinear a Fábio Carvajal en el lateral izquierdo y a Arnold en el derecho, dependiendo de su estado, lo que influiría en las opciones de ataque por esas bandas. En el apartado ofensivo, Vinícius y Rodrygo siguen siendo referencias, mientras que Courtois aparece como hombre clave en cualquier escenario de dificultad defensiva.
Barcelona: ausencias y búsqueda de ritmo
El Barça todavía no alcanza el nivel de la temporada anterior; lesiones y cansancio han afectado el rendimiento, y Flick intenta recuperar la vitalidad para presentar la mejor versión posible.
La llegada de Marcus Rashford añade un impulso ofensivo, pero la ausencia de Rafinha es una baja sensible por su velocidad, explosión y determinación en la banda.
La ausencia de Rafinha obliga a redistribuir roles y a ajustar detalles tácticos; Lamine Yamal y Ferran Torres pueden emerger como piezas claves para abrir espacios y desequilibrar. La vuelta de Ferran aporta movilidad, defensa y generación de espacios para sus compañeros.
Frente al Real Madrid, Barcelona debe vigilar la velocidad de Vinícius, Rodrygo y la movilidad de Ibrahim Díaz, buscando mantener las líneas compactas y presionar temprano para cortar la construcción desde atrás. Araújo figura como pilar en duelos individuales y en la salida de balón, mientras que el equipo priorizará la presión alta para dificultar la creación rival.
La idea de Flick es avanzar con toques precisos, reducir pérdidas y aprovechar las incursiones rápidas de Yamal y Rashford. La idea es sostener la posesión, generar profundidad por las bandas y buscar la conexión entre Pedri y De Jong para mover al rival y crear oportunidades. El regreso de Ferran Torres aporta dinamismo y opciones para abrir la defensa rival.
En el plano ofensivo, la elaboración se apoyará principalmente en la pareja de mando Pedri-De Jong, con la defensa manteniendo la concentración frente a la presión y el intento de mantener un bloque bajo para resistir el empuje rival.