Barcelona busca salvar el año: un amistoso en Sudamérica para compensar pérdidas de Miami
29 octubre 2025
Contexto económico y plan de recuperación
Después de la cancelación del amistoso programado en Miami entre Barcelona y Villarreal, el club catalán está buscando una alternativa que cubra las pérdidas millonarias. La opción que gana fuerza es un partido amistoso en Sudamérica, con Perú como escenario, para diciembre próximo, con una oferta que podría rondar los 8 millones de euros.
Detalles de la negociación y posibles escenarios
Según la prensa española, el Barcelona mantiene conversaciones para cerrar este encuentro, que podría reportar entre 7 y 8 millones de euros y ayudaría a compensar también la cancelación de otro choque en Libia por motivos de seguridad, que podría haber dejado cerca de 5 millones más.
Se apunta a que Atlético de Madrid dio luz verde para un choque en Libia, pero Barcelona se mantuvo al margen, lo que aceleró cambios en la planificación.
El objetivo es defender la economía del club sin menoscabar el rendimiento deportivo. La idea es que este partido amistoso en Perú se juegue tras el encuentro de La Liga frente a Villarreal, el último de 2025, y que sirva para acercar ingresos antes del cierre del año.
La planificación contempla que, tras ese encuentro, se defina con la Asociación de Jugadores Españoles el último día de trabajo de los futbolistas antes de las vacaciones invernales, para no romper la continuidad de la plantilla en plena temporada.
Además, el plan prevé que Barcelona se enfrente a Espanyol el 3 o 4 de enero de 2026 en el estadio Cornella-El Prat, como parte de la programación del inicio de año. Este duelo podría servir como cierre de la etapa previa a la retoma de la competición.
Una nota histórica: la idea de jugar la Liga fuera de España no es nueva. En 2018, Relivent intentó organizar un Barcelona-Gerona en Miami; luego hubo intentos similares entre Villarreal y Atlético Madrid (2019-2020) y Barcelona-Atlético Madrid (2023-2024), sin que llegaran a buen puerto. La Liga ha insistido en cuidar la integridad de las competiciones nacionales, pero no ha dejado de estudiar fórmulas para ampliar su alcance global.
En su comunicado, la Liga señaló que el proyecto hubiese generado entre 5 y 6 millones de euros para Barcelona y Villarreal. La negativa a proseguir frenó el proyecto, y desde el club y la liga se subrayó que la prioridad es el crecimiento de la competición y el desarrollo de sus ingresos, sin perjudicar la competitividad de la competición nacional.
En el plano deportivo, el enfado de Villarreal fue notable tras la retirada del Miami; la radio adelantó que los directivos estaban descontentos con la gestión de la Liga, y el entrenador Marcelino García Toral respondió que no era correcto publicar un comunicado mientras se disputaba un partido. Las cámaras captaron al presidente del club, Fernando Roig, visiblemente enfadado al concluir el encuentro, reflejando la frustración por el fracaso del proyecto.
En definitiva, Barcelona continúa buscando vías para reforzar su presupuesto y mantener el rendimiento deportivo. Si se cierra la negociación peruana, podría marcar un antes y un después en la estrategia económica del club, con un enfoque más práctico que espectacular.
Chistes finales (punchlines):
1) Si la economía se moviera como Messi con el balón, ya tendríamos la Champions en la sala de estar.
2) Cobrar en soles peruanos suena bien, pero mejor cobrar en euros para no perder el cambio ni la siesta.